Dr. Denis Panozo Villarroel
Esta pandemia ha logrado que las familias se reencuentren en sus hogares sin apelación. Es increíble cómo a pesar ser familia, las labores diarias de cada uno y de cada día logra un distanciamiento de sus seres queridos, al preocuparse cada uno de sus actividades y responsabilidades, que muchas veces los distancian de sus seres queridos y lo reemplazan por compañeros de labores y nuevos amigos que aparecen en su entorno y se vuelven extraño y comienzan lentamente a alejarse del hogar, ya que hay otras prioridades que comienzan a mermar esa unión familiar.
De un día a otro las autoridades nos obligan a volver a casa a compartir las 24 horas como familia, no hay escapes, se acabaron las juntas con amigos, los carretes, las compras en los mall, los fines de semana al campo, a la playa, a ver familiares etc, es decir confinado al hogar. Al comienzo hay calma, porque siempre anhelamos tener más tiempo para la familia y disfrutaremos este recreo loco que nos están dando. Pero la paz del hogar va sufriendo un desgaste por diversas causas, apoderándose de los integrantes unas malas vibras producto de los roces diarios, que al comienzo son pequeños, pero al ser repetitivo se convierten en conflictos que provocan una enemistad que nubla la buena convivencia y la tranquilidad inicial.
Para evitar caer en este torbellino de malas vibras, hay que tener siempre presente el motivo que nos llevó a esta situación, para calmar las aguas y no naufragar frente a esta tempestad llamada pandemia Covid-19. Tenemos que sobrevivir y fortalecernos como familia, tratar de sacar un provecho a este periodo odioso que nos ha tocado vivir, volver a mirarnos, tocarnos, conversar, a conocernos y reaprender a convivir, en primer lugar a valorar las cosas positivas sobre las cosas negativas, mirarnos con cariño, más que mal todos tenemos una raíz común, un tronco principal de donde brotamos y nos hemos desarrollado, no hay que perder de vista esta verdad, de esta manera todos creceremos sin reprocharnos. De esta manera vamos a salir bien de esta tormenta perfecta llamada pandemia del coronavirus..
