Dos horas de espera de chilenos que retornaron el domingo al país.
En la ida Horcones tuvo largas filas y una demora de hasta 6 horas.
El largo fin de semana significó que muchos chilenos aprovecharon de viajar a Argentina, particularmente porque ahora el cambio favorece a los connacionales.
Esta salida masiva a través del Sistema Integrado Cristo Redentor provocó el jueves un colapso en el complejo fronterizo de Horcones, que se tradujo en hasta 6 horas de espera en los trámites migratorios y aduaneros para ingresar a suelo argentino.
Se calcula que entre jueves y viernes salieron del país más de 2.500 automóviles chilenos que colapsaron la capacidad de Horcones.
El domingo el problema se trasladó al nuevo complejo Los Libertadores cuando el grueso de los viajeros retornaron casi a la misma hora originándose esperas superiores a las 2 horas, colocando a prueba la capacidad y logística del nuevo puesto fronterizo chileno, convirtiéndose en la primera prueba de fuego desde que inició su funcionamiento.
Se había estimado que el retorno sería dosificado, entre la tarde del sábado, domingo y los rezagados durante la mañana de ayer lunes, pero los cálculos no respondieron a la realidad, porque entre las 15:00 y 21:00 horas del domingo se produjo el retorno del grueso de los vehículos provocando largas filas y esperas de dos y más horas antes de llegar a las casetas de atención migratoria del nuevo complejo.
El gobernador provincial, Sergio Salazar, al referirse al balance del comportamiento del sistema integrado durante el último fin de semana largo del año, expresó que “300 vehículos regresaron el sábado, el domingo en la mañana regresaron otros 300, y el grueso de los vehículos –cerca de 1.500- regresaron entre las 15:00 y 21:00 horas del mismo domingo, con lo cual durante 6 horas a nuestra máxima capacidad la atención demoró dos horas por cada usuario. Se registraron algunas filas pero en ningún caso se puede comparar con las filas registradas en el complejo argentino de Horcones”.
Los viajeros a su regreso al país comentaron que en la ida tuvieron que esperar hasta 6 horas en Horcones el jueves, “mientras que por este lado claramente demoraron mucho menos de la mitad del tiempo”
DESAFÍOS PENDIENTES
El largo fin de semana fue muy positivo para el complejo chileno a objeto de observar algunos puntos débiles para efectuar las correcciones necesarias.
“Todavía tenemos desafíos pendientes, esperamos que nuestra capacidad de reacción permita que nuestra práctica haga que los tiempos (de atención) sigan bajando. En circunstancias como la del último fin de semana nuestra máxima atención será en los tiempos que tardamos ayer (domingo)”.
La autoridad destacó la atención expedita y rápida de los buses y camiones, “los que tardaron muy poco tiempo en pasar. Probablemente podemos mejorar un poco más bajando los tiempos, pero nuestra expectativa es tardar más o menos lo que tardamos el domingo”, expresó.
