Según la institución, en Chile existen casi 2.500 extranjeros sin sus papeles al día. A ellos está dirigida la iniciativa «Regularizado se trabaja mejor», que pretende incentivarlos a obtener los permisos necesarios.
Con la campaña “Regularizado se trabaja mejor”, la Policía de Investigaciones comenzó un proceso de fiscalización para promover que los extranjeros inmigrantes que trabajan en el país sin la autorización necesaria, regularicen su situación.
“Al estar irregular no tienen derecho al seguro de salud, a AFP y muchas veces no se respetan sus derechos laborales. Nuestro objetivo es fiscalizar a empleadores y extranjeros para que los migrantes puedan regularizar su situación de permanencia en el país y así obtener los derechos que corresponden como trabajadores”, explicó el jefe nacional (S) de Extranjería y Policía Internacional de la PDI, Bernardino Cárdenas.
La PDI estima que existen unos 2.500 migrantes que se encontrarían en una situación irregular, cifra calculada a partir de la cantidad de denuncias registradas por extranjeros sin documentación al día.
Asimismo, la institución informó que en 2015, cerca de ocho mil extranjeros cometieron alguna infracción a la Ley de Extranjería. Entre éstas, permanecer en territorio nacional más tiempo de lo permitido en su visa, no realizar sus trámites migratorios, no registrar la visa en los plazos estipulados y obtener un trabajo sin la visa necesaria.
Estos representan el 0.13% de los extranjeros que entraron al país como turistas, cifra que alcanzó un peak de 5,8 millones de personas el año pasado.
“Esta no es una persecución contra los extranjeros. Si ellos están en situación irregular no significa que serán expulsados, ya que las sanciones establecidas por ley incluyen multa o amonestación por escrito. Así pueden optar a adquirir una residencia que les ayudará a salir del anonimato y tener acceso a los derechos laborales y sociales”, añadió Cárdenas.
La institución ha realizado capacitaciones a los fiscalizadores municipales, funcionarios de la Dirección del Trabajo y también a monitores externos y de juntas de vecinos.
Según publica el Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior, las multas para extranjeros que residen de forma irregular o trabajan sin autorización van desde $ 36.543 a $ 370.410. Para empleadores, las multas pueden llegar hasta los $ 730.853 si es una persona natural y $1.850.387, si es una persona jurídica.