Supuesta restauradora, quien fue arrestada, se lo había llevado hace tres años.
Después de una serie de diligencias desarrolladas en virtud a una orden de investigar instruidas por la Fiscalía de San Felipe, detectives de la Brigada de Delitos contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) de la PDI Valparaíso lograron la recuperación de una calesa, carruaje que data del Siglo XVIII perteneciente a la colección del museo de la iglesia y convento de Curimón, que había sido sustraído el 2017.
En el procedimiento policial también se arrestó a la mujer de iniciales T.B.B., con antecedentes anteriores por apropiación indebida.
Conforme a los antecedentes informados por la PDI, la imputada hace tres años se acercó hasta las dependencias del Monumento Histórico Nacional y ofreció sus servicios como una supuesta restauradora, con lo que se ganó la confianza del párroco y administrador del recinto religioso.
Una vez que pudo persuadir al encargado del lugar, procedió a retirar el carruaje con el argumento que en el plazo de un mes lo retornaría con los arreglos que debía realizar, hecho que finalmente nunca sucedió.
Con la información recabada y luego del trabajo de análisis criminal, la policía civil pudo dar con el paradero de la mujer y así recuperar esta especie histórica.
Al referirse a esta diligencia, el subprefecto Carlos Valenzuela, jefe de la Bidema Valparaíso, señaló que a la calesa no se le puede cuantificar un valor comercial “ya que constituye un objeto único, construido a inicios del 1700 y que está autentificado por el Servicio Nacional de Patrimonio Cultural como original, lo que le concede un alto valor patrimonial para el Estado de Chile”.
En tanto, la imputada fue puesta a disposición del Juzgado de Garantía para su formalización por parte del Ministerio Público.
