Ayer le fue devuelta a su propietario.
Una moto todo terreno, marca Honda model XR250, que había sido robada desde un domicilio de la comuna de San Esteban y que su dueño avaluó en alrededor de $2.000.000, fue recuperada por detectives de la Brigada Investigadora de Robos (Biro) de la Policía de Investigaciones (PDI) Los Andes.
El vehículo fue encontrado en la casa de uno de los delincuentes arrestados la madrugada del miércoles en la Población 250 Años de San Felipe, integrante de la peligrosa banda delictual “Los Vaquillas” y en el desarrollo del operativo por la denominada “Operación Águila”.
Conforme a los antecedentes, la sustracción de la moto se produjo por parte de al menos un antisocial aproximadamente a las 22:20 horas del pasado viernes 17 del presente mes, al ser sacada desde el antejardín de la casa en donde permanecía estacionada.
En esos momentos el propietario y su familia estaban al interior del inmueble viendo televisión, cuando en un momento sintieron que fue cerrada fuertemente la puerta de la reja, saliendo a verificar qué había pasado una hija y que no logró ver al delincuente, por cuanto huyó del lugar raudamente a bordo del vehículo.
Sin embargo, esa noche no advirtieron que había sido robada la moto, sino que la mañana del sábado el propietario no la encontró en los momentos que iba a irse al trabajo.
El delito fue denunciado en su oportunidad ante Carabineros de San Esteban y luego, por instrucción del fiscal, las diligencias quedaron a cargo de la Biro Los Andes.
Durante el miércoles personal policial tomó contacto con la víctima y le informó sobre la recuperación de la moto, acudiendo el propietario en horas del mediodía del jueves hasta el cuartel de la PDI donde le fue devuelta.
El afectado, Eduardo Quezada, se mostró contento por este hecho, destacando y agradeciendo la dedicación y eficiencia de los detectives de la Biro de la PDI Los Andes “que realizaron un buen trabajo en tan poco tiempo”.
Indicó que el vehículo lo tiene hace unos 20 años “y me sirve mucho, porque la ocupo para trasladarme hasta mi lugar de trabajo y los fines de semana para salir de paseo”.
Comentó que tras el robo pensó que la había perdido para siempre, “pero mi señora nunca perdió la esperanza con que iba a aparecer”.
