Sujeto que permanecía prófugo se resistió al arresto y agredió a detective
La medida cautelar de prisión preventiva dispuso la magistrado Valeria Crosa en contra de los dos imputados que fueron detenidos en la comuna de Calle Larga por funcionarios de la Brigada Investigadora de Robos (Biro) de la PDI Los Andes, el chileno R.G.L. y el boliviano S.Z.C., luego que fueran formalizados por el delito de tráfico de droga por el Ministerio Público de Los Andes.
Como informamos, ambos sujetos fueron aprehendidos en el marco de una diligencia que se llevaba adelante para dar con el paradero de quien conducía un automóvil Subaru Impreza que había sido robado desde una vivienda de la ciudad de Los Andes, el que se dio a la fuga al ser visto circular por la comuna de Calle Larga y que luego de habérsele dado alcance el conductor lanzó el vehículo sobre los detectives que lo iban a controlar, lesionando a uno de ellos en una pierna.
Fue así que con la orden de entrada y registro otorgada por la jueza de Garantía, los policías ingresaron a un domicilio de la Población Campos de Pocuro y en donde encontraron a los dos individuos.
Ante la presencia de los detectives, R.G.L. se resistió tenazmente al arresto y se abalanzó sobre uno de los funcionarios al que le propinó un golpe de puño en el rostro y le provocó una lesión, motivo por el cual los otros policías debieron hacer uso de la fuerza para sacarlo de encima, reducirlo y esposarlo; por su parte la detención del extranjero fue sin contratiempos.
Al registrarse el inmueble, se encontró una caja fuerte sin llave en donde se guardaban 547 envoltorios contenedores de 52 gramos y 89 milígramos de pasta base de cocaína, la que estaba destinada a la venta.
En declaración a la PDI, el aprehendido chileno dijo que la droga era de su propiedad y que la había comprado en Santiago, corroborando que la mantenía dosificada para su venta.
Al ser puestos a disposición del Juzgado de Garantía, el fiscal Raúl Ochoa formuló los cargos de la investigación en contra de los dos imputados y señaló que mantienen causas y condenas anteriores, solicitando la medida cautelar más severa.
Conocidos los antecedentes expuestos por el persecutor y el defensor, la jueza dio por acreditados los hechos y la participación de ambos en el ilícito, acotando que por la pena del delito, el que no pueden optar a beneficios y el peligro para la seguridad de la sociedad decretó la prisión preventiva, fijando un plazo de investigación de 4 meses y haciendo ingreso los imputados a la Cárcel de Los Andes.