La Municipalidad de Los Andes a través de la Unidad de Seguridad Pública está gestionando un proyecto destinado a incrementar la instalación de cámaras de vigilancia, con la incorporación de 53 nuevas cámaras, que serán instaladas en distintos puntos del damero central y periférico de la comuna, en otro esfuerzo por mejorar la sensación de seguridad en la ciudadanía.
La iniciativa fue presentada por Secplan a instancias de la Unidad de Seguridad Pública para el financiamiento del proyecto que demandará una inversión de $900 millones, considerando más de medio centenar de cámaras y la renovación de las actuales unidades con dispositivos de mejor resolución, lo que permitirá una mayor certeza en los casos de delitos que sean detectados.
El gobierno comunal había gestionado los recursos al Fondo Nacional de Desarrollo Regional, pero tuvo algunos inconvenientes iniciales, los que felizmente fueron solucionados con la intervención del alcalde Manuel Rivera, quien se reunió con el encargado de Control de Gestión y Evaluación de Proyectos del Gobierno Regional, quien levantó las restricciones iniciales.
El proyecto de las nuevas cámaras considera, por otra parte, el traslado de la central de control de las unidades a dependencias de la Municipalidad de Los Andes, lo que permitirá obtener un mejor resultado y control de la labor que realizan los operadores de las unidades de vigilancia.
Se indicó que estas nuevas cámaras que serán adquiridas, son dotadas de tecnología con portales de identificación de patentes de vehículos, lo que permitirá brindar la información a Carabineros en el caso de detectarse vehículos robados.
Por otro lado, las nuevas cámaras de alta tecnología que serán instaladas en el área céntrica de Los Andes, vienen con dispositivos que permitirán la identificación facial de personas con orden de detención pendiente, en base a los registros de Carabineros y la PDI.
El proyecto será tratado por el Gobierno Regional para que sea incorporado al marco presupuestario, y será presentado en las próximas reuniones del Consejo Regional, antes de la instalación del nuevo CORE, con la idea de que se disponga de la destinación de los recursos que indicó la cotización presupuestaria.