Se desconoce cuantos son los casos diagnosticados en Chile de esta enfermedad, que ataca más a hombres que a mujeres y que es bastante dolorosa. Pero qué es en realidad la enfermedad que aqueja al arquero nacional, Johnny Herrera, cuáles son sus síntomas y tratamientos. A continuación, respondemos estas y otras consultas.
La Espondilitis Anquilosante, es un tipo de artritis que se considera como una enfermedad, progresiva, sistémica y crónica. Se trata de un fenómeno inflamatorio de las articulaciones y ligamentos de la columna, generando un dolor en la zona lumbar y dorsal -zona que está superior a la región lumbar- y que hace que la persona experimente molestias al realizar movimientos.
La causa es multifactorial, a nivel genetico las investigaciones relacionan la enfermedad a un tipo de gen (HLA-B27) que en el 80% de los casos diagnosticados se encuentra presente, sin embargo este gen también está presente en personas que no desarrollan la enfermedad, aunque su representación es mucho menor, un 8%.
Sus sintomas pueden presentarse desde la infancia hasta los 40 años y se va a manifestar de diferentes maneras en cada persona que la padezca, llegando a ser muy leve en algunas y en otras progresar rápidamente a un nivel grave. Luego de la confirmación diagnóstica certera y precoz, en base a criterios clinicos y de imagen, estas permitirán realizar un tratamiento diferenciado de acuerdo a las características únicas de cada persona. El médico tratante podrá entonces determinar varios tratamientos que van desde un apoyo farmacológico, como hacer una infiltración de algún tipo de corticoide y analgésicos antinflamatorio. Pero también derivar a Kinesiólogos especialistas en el area músculo esquelética.
El Kinesiólogo especialista y académico de la Universidad San Sebastián, Rodrigo Carrasco, señala que una de las claves para tratar esta enfermedad es mantener la zona en movimiento, “el sustento que se realiza para mantener un adecuado funcionamiento de este sistema es en base a la movilidad, al fortalecimiento muscular, ejercicios de flexibilización que serán necesarios para que este tejido no se rigidice, porque al rigidizarse hace que el tejido se vea más involucrado y genere mayor nivel de restricción. Para esto y de acuerdo a cada paciente, se utilizan recursos terapéuticos como aplicaciones de calor, ejercicios de estabilicación y mucha educación respecto a que el movimiento va a ser uno de los pilares fundamentales del tratamiento propiamente tal”.
El rol del Kinesiólogo, va desde la educación, sobre las actividades generales y especificas del movimiento y como abordar situaciones en el dia a dia, hasta enseñar a cómo enfrentar cosas tan sencillas y simples como acostarse. “Hay indicaciones para estos pacientes que generalmente está orientada a no ubicarse de lado o posición fetal, porque eso hace que el tejido que ya está inflamado pueda ir acomodando una posición de deformación, por tanto se le sugiere a ellos que duerman boca arriba, con las piernas extendidas cosa de evitar el vicio de flexión del tronco hacia adelante”, menciona el académico.
El pronóstico de la enfermedad dependerá única y exclusivamente de las la forma e intensidad de presentación en cada persona en particular, por lo que requiere un apoyo multidisciplinario para un abordaje integral de una enfermedad que es más común de lo que parece.