Un trabajador que estaba afligido por una deuda de pensión alimenticia que amenazaba con enviarlo a la cárcel, abusó de la confianza que una amiga había depositado en él y decidió empeñar una costosa bicicleta que la mujer le había prestado.
Se trata de un hombre de iniciales J.V.D., de 31 años, que le había solicitado a su amiga M.P. que le facilitara su bicicleta Trek, avaluada en $ 350.000 y que se le restituiría durante el día.
La mujer confiando en la palabra de su amigo le prestó la bicicleta, pero pasaban las horas y los días y el temporero no la devolvió.
Se descubrió posteriormente que el sujeto había concurrido a la Caja de Crédito Prendario de Los Andes, la popular Tía Rica, y empeñó la especie, y el dinero que recibió lo utilizó para pagar una deuda por pensión alimenticia para evitar ser encarcelado.
La afectada en absoluto desconocimiento de lo que había hecho su amigo con la bicicleta comenzó a pedirle que se la devolviera, pero el sujeto hizo caso omiso a sus peticiones, pero tampoco concurrió a rescatarla desde la Tía Rica.
La mujer ante la nula respuesta del sujeto optó finalmente por denunciarlo ante Carabineros que procedieron a la detención del obrero y con ello se estableció la verdad.
El individuo fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía donde fue formalizado por el delito de apropiación indebida.
Las partes llegaron a un acuerdo reparatorio mediante el cual el imputado deberá devolver el valor de la bicicleta en cuatro cuotas