Por: Gmo. Zenteno R. , presidente Turismo Aconcagua A.G.
Nuestro Valle de Aconcagua con sus dos provincias y sus 10 comunas tiene en lo turístico una oferta de productos y servicios muy amplia y de calidad, pero ella requiere para ser puesta a la altura de las exigencias de la demanda, de una coordinación profesional integral que permita ubicar en el mercado productos atractivos para la amplia variedad de públicos que arriban al Valle.
Esa demanda proviene preferentemente de la Región Metropolitana, del litoral de Valparaíso y de la región de Cuyo, reuniendo sólo en esos tres ámbitos un potencial de ocho millones de personas. Es allá donde debemos colocar todo el esfuerzo de difusión y de programas desde un día hasta semanas, dado que nuestra realidad turística tiene para ello, muchas alternativas.
Pero, ¿Cómo debemos activar esa iniciativa?. En primer lugar, uniendo en un trabajo en conjunto al empresariado local organizado gremialmente con sus autoridades: Los 10 Municipios y las 2 Gobernaciones.
El Valle de Aconcagua es imposible impulsarlo turísticamente a través de esfuerzos realizados sólo por cada comuna o provincia. Debemos unir a todo el territorio tras un plan común y con una dirección profesional que promueva lo existente y desarrolle nuevas alternativas.
El turista no arriba a Aconcagua tras un objetivo establecido en una comuna, sino que viene a un territorio sin importarle las divisiones administrativas; por ello, es importante para la promoción de nuestro activo turístico tener una mirada de valle con una oferta amplia de productos y servicios que afortunadamente en Aconcagua permite distribuirla durante todo el año.
Hoy el empresariado unido gremialmente necesita de ese encuentro con la autoridad pública para enfrentar el crecimiento de la industria turística, con programas, con metas y con financiamiento. Mientras no haya un compromiso público-privado es muy difícil ampliar las posibilidades de incrementar el desarrollo de toda la actividad.
El Valle de Aconcagua está en medio de una fuerte competencia con Colchagua, Elqui, Curacaví, entre otros territorios, y por ello se hace necesario actuar en conjunto con rapidez. El sector privado viene reiterando desde hace mucho tiempo la necesidad de establecer un Plan de Desarrollo Turístico para el Valle que aúne a Sernatur, las Gobernaciones y los 10 Municipios. Ese debe ser el compromiso de hoy; sino nuestro futuro será solamente una ilusión.
