Por:Katherine Dinamarca Aravena, fonoaudióloga Facultad Ciencias Rehabilitación U. Andrés Bello
La temporada de vacaciones no sólo puede ser sinónimo de piscina, sol, salidas al aire libre, sino que también una instancia para poner atención a la interacción comunicativa y al tipo de actividades lúdicas que se puede realizar con los hijos o con los pequeños que se puedan tener al cuidado, desde 0 mes hasta tres años.
Durante los dos primeros años de vida en un niño ocurren una serie de cambios que van formando a la persona, el desarrollo del lenguaje y la comunicación es un hito indispensable para la interacción con el medio. Esta habilidad cognitiva abre aprendizajes y experiencias que enriquecen su ser, por lo tanto, es fundamental que exista interacción con adultos y otros niños pues son el mejor referente y modelo para contribuir a un buen desarrollo.
Se puede jugar utilizando cualquier objeto, no necesariamente deben ser juguetes de alto costo, incluso una caja de cartón es un buen aporte si la forma de jugar es la adecuada.
Mirar al niño a la cara, realizar seguimiento de objetos con burbujas, elementos con sonidos, coloridos o inventar una historia; bailar y cantar con el pequeño, entre otras cosas, son algunos tips que ayudarán a crear juegos con contenido lingüístico comunicativo con el que se puede conseguir, además de pasar un buen rato y entretener a los pequeños, desarrollar poco a poco estas habilidades.
Son muchas las actividades que se pueden realizar con el bebé o niño, que son de fácil acceso y de bajo costo. Sólo hace falta imaginación, creatividad y buen ánimo para hacer de cualquier actividad algo entretenido.
Cabe recordar que todos los niños tienen distintos ritmos de aprendizajes, por lo que no debes compararlo, pero sí estar atenta si notas conductas que escapan al común de los niños que te rodean. La consulta a un profesional permitirá aclarar tus dudas y te orientará al respecto.