Esval realizará obras por US$ 36 millones para desviar el recurso hídrico hacia el Embalse Los Aromos.
Los 800 millones de metros cúbicos de agua del río Aconcagua que se pierden anualmente en el mar porque Los Andes los deja pasar por carecer de un embalse de cabecera, comenzarán a ser aprovechados por lo menos en invierno para depositarlos en el Embalse Los Aromos y con ello asegurar el suministro de agua potable para Valparaíso.
OBRAS COSTARAN US$ 36 MILLONES
La iniciativa surgió entre los técnicos de Esval ante la crisis hídrica y destinada a asegurar el abastecimiento de agua potable para Valparaíso hasta el 2040, lo que se conseguirá con la construcción de un sistema de tuberías que capturará las aguas del río Aconcagua antes que se pierdan en el mar, lo que significará una inversión de US$ 36 millones.
EL PROYECTO DE ESVAL
Según explicó José Luis Murillo, gerente general de Esval a El Mercurio, Esval está en plenas negociaciones con la Dirección de Obras Hidráulicas del Ministerio de Obras Públicas para llevar a la práctica un plan que contempla tres etapas y que tiene como eje central el embalse porteño y el río Aconcagua. La primera etapa en desarrollo contempla la construcción de 4 kilómetros de tubería entre el sector de Colmo, en Quillota, y la planta de producción de agua potable de Esval en Concón, que permitirá reducir el ríesgo de pérdida e infiltración del agua que antes se conducía desde el tranque hasta el río Aconcagua a través del estero Limache.
Las dos fases posteriores, requieren la renovación por un plazo mayor del convenio de uso que la empresa mantiene con el MOP, que es el propietario del embalse. Se trata de sumar otros 9 kilómetros de conducción, para enlazar Los Aromos con la tubería mencionada. Este ducto tendrá además la particularidad de ser bidireccional, lo que permitirá no solo llevar agua a la planta, reduciendo las pérdidas casi por completo, sino que también recargar el embalse desde la desembocadura del río Aconcagua, en Concón, bombeando contra la bravead los excedentes del río en invierno.
10 AÑOS DE SOSTENIDA SEQUIA
Aconcagua vive una crisis hídrica que ya se prolonga por espacio de diez años. En la década del 70 surgió la construcción del Embalse Puntilla del Viento, en Las Vizcachas. Se alcanzó a construir un túnel de desviación de las aguas del río Aconcagua para levantar la cortina de 120 metros de altura, además de un nuevo trazado del Ferrocarril Transandino y del Camino Internacional. Con los años el proyecto fue desechado -pese a los millones que se habían invertido- porque además de algunas recomendaciones técnicas surgidas había que erradicar 540 familias y se creaba un grave problema social.
SOLUCION: EMBALSE EN JUNCAL
Las últimas semanas el Ministerio de Obras Públicas anunció que como una manera de enfrentar la falta del recurso hídrico, tiene proyectado construir un embalse de cabecera en el sector de Juncal, lo que permitirá almacenar las aguas que se pierden en el mar. La consejera regional María Victoria Rodríguez mostró su preocupación por este proyecto porque dijo que afectaría el Santuario de la Naturaleza del Parque Alto Juncal. Pero el gobernador de Los Andes, Sergio Salazar, precisó a El Andino que el proyecto del embalse no afectaría ese proyecto, porque la represa estaría localizada hacía el poniente, alejado de ese punto, que es muy al oriente.